Según la OMS (2005) es un conjunto de normas y medidas para proteger la salud de las personas frente a riesgos biológicos, químicos y físicos a los que está expuesto en el desempeño de sus funciones, también a los usuarios y al medio ambiente. En el ámbito laboral, se entiende como aquel conjunto de medidas o prácticas destinadas a mantener controlados los riesgos laborales provenientes principalmente de factores, físicos, químicos o biológicos y que afectan la salud de las personas.

Proceso de identificar, analizar y gestionar los riesgos a los que puede estar expuesta la organización, validar la eficiencia de los controles en forma proactiva y crear planes de acción que ayude a mitigarlos, aprovecharlos o en caso de que no se puedan prevenir contar con una estrategia que permita reducir las pérdidas.

Conjunto de medidas destinadas a prevenir la trasmisión de microorganismos (virus, bacterias) durante la interacción de personas en actividades turísticas, con clientes/usuarios. Permiten prevenir la transmisión de Covid-19 u otros microorganismos, entre el personal, entre personal y cliente/usuario, entre clientes/usuarios. Incluye los siguientes procedimientos: higiene de manos, uso de EPP, higiene respiratoria (buenos hábitos al toser y/o estornudar), manejo de material y superficies, de vestuario, manejo de desechos riesgosos (contaminados).

Son el conjunto de elementos de equipamiento, componente de las precauciones estándares, destinados a proteger la piel y mucosas del operador en forma de barreras y evitar que se ponga en contacto con los agentes infecciosos o fluidos, fómites, superficies u otros componentes ambientales donde pueden encontrarse los agentes. La cara se considera la zona de mayor riesgo de entrada del virus, por mucosa conjuntival, nasal y oral. Incluye los siguientes elementos: mascarilla facial, antiparra o escudo facial, delantal plástico, pechera desechable, guantes desechables de nitrilo o látex impermeables, gorro.

Consiste en la eliminación física, por método de arrastre, de toda suciedad incluyendo materia orgánica que puede contener agentes infecciosos.

Es el proceso mediante el cual se eliminan gérmenes utilizando agentes físicos o químicos.

Se puede realizar a través de dos procedimientos: lavarse las manos con agua y jabón, y también con el uso de un desinfectante a base de alcohol al 70%.

Es considerada una medida de prevención estándar aplicable a todas las personas sintomáticas respiratorias. Previene el contagio de todas las infecciones respiratorias en ámbitos turísticos relacionada con el contacto con personas posiblemente infectadas. Para ello se debe cubrir la boca y nariz con un pañuelo desechable al toser o estornudar, también se puede realizar en el pliegue de codo o antebrazo. Luego se elimina el pañuelo. Finalmente, se realiza higiene de manos tras estar en contacto con secreciones respiratorias y objetos/materiales contaminados.

Es todo material y residuo que estuvo en contacto con personas o puede contener secreciones o fluidos de personas. Debe ser eliminado en bolsa plática o automática. También puede ser eliminado en bolsa común.

Desinfectante de mayor uso a nivel universal al tratarse de un ser activo contra todos los microorganismos. El producto recomendable a usar debe ser hipoclorito de sodio con concentración de cloro de 4,5 o 5%.

Compuesto desinfectante a base de nitrógeno soluble al agua y alcohol. Es efectivo frente a bacterias y hongos, pero débil ante virus y esporas. 

Desinfectante más usado mundialmente. Se utiliza sobre superficies o de forma tópica (sobre la piel). Es capaz de eliminar bacterias, virus y hongos, pero no esporas.

Consiste en desinfección mediante equipos que irradian luz ultravioleta con longitud de onda entre 200 a 295 nanómetros (nm), siendo lo óptimo 265 nm. Lanzan dosis definidas de energía para destruir bacterias, virus, hongos y parásitos, pero no esporas.